PERFORMANCE
EL CUERPO OLVIDADO
El Cuerpo olvidado es una obra de danza- performance que usa como dispositivo una serie de esculturas de Carlos Escoriza realizadas en hierro y polipropileno y una obra sonora compuesta por Hernán Gómez realizada con sonidos de máquinas.
La Obra es un working progress ya que tanto las esculturas como la obra sonora pertenecen a un experiencia de trabajo anterior, que consistió en un proyecto de experimentación dentro de la fábrica de envases de plástico IPA.
El resultado de ese proyecto anterior es resignificado ahora en un cruce con la danza contemporánea bajo la dirección de Valentina Fusari.